En su artículo para el Consejo de Forbes, Sajid Mohamedy, vicepresidente ejecutivo de Crecimiento y Entrega de Nisum, destaca las empresas que tomaron el comercio digital ágil como un imperativo empresarial y ganaron durante la pandemia de COVID-19 frente a otras a las que les pilló desprevenidas.

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El COVID-19 ha supuesto una llamada de atención para las empresas a muchos niveles. Incluso las empresas más expertas en tecnología se encuentran desamparadas en la situación actual, a pesar de que el comercio electrónico existe desde hace más de dos décadas.

Shira Ovide, la escritora del New York Times responsable del boletín "On Tech" de la publicación, ha dado en el clavo en su reciente artículo "Reliable Amazon Isn't Anymore". Mientras incluso los gigantes del comercio electrónico pasan apuros en estos momentos, Ovide plantea algunas preguntas muy válidas sobre cómo esta experiencia cambiará irrevocablemente los hábitos de compra de los consumidores.

En todos los sectores, casi todas las empresas se están replanteando su forma de hacer negocios como consecuencia de la pandemia. Ante un acontecimiento externo, global, impredecible y sin precedentes, algo que ha quedado relativamente claro en medio de tanta incertidumbre es que el comercio digital no es sólo una palabra de moda; es fundamental para la continuidad de las empresas.

Aunque el cambio organizativo puede ser difícil y requiere ciertas inversiones, todos estamos viendo de primera mano en estos momentos lo importante que es la tecnología adecuada para ayudar a las empresas a capear lo impredecible.

Picos de demanda inesperados

Como consecuencia del COVID-19, la demanda de ciertos productos se ha disparado y, al mismo tiempo, los consumidores confían más que nunca en el comercio electrónico.

Lo vemos con los productos de limpieza, las mascarillas y el papel higiénico. Es casi imposible encontrar estos artículos en línea con una entrega a tiempo debido a la escasez. El pánico de los consumidores ha agotado la oferta.

Sin embargo, también estamos viendo un aumento de la demanda en algunos sectores y segmentos más especializados, como las manualidades, los rompecabezas y los aparatos de gimnasia doméstica. Lo que frena a estas empresas no es que no tengan existencias. Lo que frena a estas empresas no es que no tengan existencias, sino que muchas carecen de la infraestructura digital necesaria para atender la demanda actual.

Empresas que abandonan su oferta básica de productos o servicios

Muchas empresas también se han visto obligadas a abandonar rápidamente sus modelos de negocio tradicionales. Desde fabricantes de automóviles que fabrican ventiladores hasta restaurantes y tiendas de comestibles que tienen que implantar sistemas de entrega de un día para otro, muchos se están dando cuenta de lo importante que es ser ágil.

Por ejemplo, algunas tiendas físicas de Target están reponiendo existencias sólo de los productos esenciales. Esto tiene sentido, ya que se centran en los artículos que los consumidores más necesitan en este momento. Aunque sencillo y lógico, este tipo de cambio no es fácil de realizar. Para hacerlo con rapidez, Target ha necesitado disponer de una serie de piezas móviles desde el punto de vista tecnológico: sistemas de punto de venta, colaboración con proveedores, gestión de inventarios por zonas geográficas, etc.

Este es un caso de estudio para los minoristas que adoptan un enfoque de comercio unificado. Con un único sistema de registro, es mucho más fácil pivotar con rapidez.

Rupturas de la cadena de suministro

En estos momentos, estamos asistiendo a la ruptura de la cadena de suministro en todos los sectores. Esto está afectando gravemente al suministro de alimentos en todo Estados Unidos, ya que la mayoría de las explotaciones agrícolas suelen enviar alimentos a lugares que ahora están cerrados (restaurantes, escuelas, parques temáticos, estadios, grandes recintos, etc.). Según un artículo, "los agricultores están teniendo que reorganizar sus cadenas de suministro para hacer llegar más alimentos a las tiendas de comestibles y los bancos de alimentos". Esto puede llevar meses de coordinación, pero los alimentos no duran tanto, lo que provoca tremendas pérdidas.

Otras industrias se enfrentan a un reto similar: cómo reconfigurar rápidamente sus cadenas de suministro para adaptarse al entorno actual, algo cada vez más difícil de hacer cuando se depende de pilas tecnológicas antiguas y múltiples sistemas de registro.

Sistemas informáticos poco fiables

La Ingeniería de Fiabilidad del Sitio (SRE, por sus siglas en inglés) es un concepto que existe desde hace tiempo, pero que no se ha aplicado generalmente de forma holística en las organizaciones. La idea es aplicar una mentalidad de ingeniería de software a temas de operaciones y administración de sistemas, como la monitorización de guardia, la planificación del rendimiento y la capacidad, y la respuesta ante desastres, con el objetivo último de crear una visión integral de los KPI tanto de negocio como tecnológicos. Con este enfoque, los líderes ejecutivos y los ingenieros tienen a su alcance una visión completa y cristalina de los KPI empresariales y tecnológicos.

En estos momentos, el comercio digital es absolutamente necesario para que las organizaciones existan en un mundo posterior a COVID-19. La situación actual ha puesto de manifiesto lo importante que es ser ágil. La adopción de nuevas tecnologías y la modernización de los sistemas antiguos son sin duda prioritarias para los directivos de las empresas, y un enfoque más proactivo del comercio digital puede ayudar a mitigar las consecuencias económicas de este tipo de acontecimientos en el futuro.